lunes, 29 de junio de 2015

EL DESARROLLO DEL SER HUMANO EN LA ETAPA PRENATAL

INTRODUCCIÓN
La llegada de un bebé al contexto familiar implica una serie de sensaciones que son únicas. Así, desde el propio período de gestación, la familia se ve envuelta en ese gran acontecimiento. No obstante, a veces nos sacude el temor cuando el bebé ha estado sometido a determinados factores biológicos, como la prematuridad o el bajo peso y se convierte en una angustia el pensar en las probabilidades de que en los primeros años de vida pueda presentar algún tipo de dificultad en su desarrollo. De este modo, con el objetivo de orientación ofrecemos cuáles son los llamados factores de riesgo biológicos y las características del desarrollo fetal. Indudablemente, gracias al avance de la tecnología e investigaciones del mundo interior uterino, ha cambiado la forma en que nos vemos a nosotros mismos como individuos, así como la forma en que nos relacionamos con las personas que nos rodean. Así, en nuestra investigación, nuestro reto es hallar las verdaderas necesidades del ser humano desde el primer segundo de su verdadera existencia.

Esto significa que debemos tener claro el concepto de persona, de tal manera que podamos defender la vida humana desde el mismo instante de la concepción. De ahí, algunos podrán defender que el inicio de este ser como persona recién empieza con la anidación o la implantación del sistema nervioso, pero nuestra postura, desde el principio bioético “Vida” es defender a la persona y garantizar su adecuado desarrollo desde que empieza a existir, sea o no deseado este nuevo ser. Y, con mucha más razón, se podría decir que, los padres-madres que han optado libremente tener hijos, deben primero, ser conscientes de la responsabilidad y el compromiso que implica ser padre o madre; luego, deben evaluar las ventajas a la felicidad familiar y las desventajas que trae a los padres o madres respecto a su vida profesional o laboral. Si después de esto aún siguen con la decisión de ser padres, entonces, con el apoyo de ellos estos nuevos seres encontrarán adecuadas condiciones para vivir desde que empiezan a existir.

            Asimismo, veremos la Etapa de Fecundación, también llamada concepción, la cual se produce cuando un espermatozoide consigue introducirse en el Ovulo u Ovocito, atravesando una membrana. El espermatozoide atraído por la sustancia que emite el Ovocito, atraviesa el cuello del útero y se encuentra con el Ovulo en una de las Trompas de Falopio, cuyas vellosidades son las encargadas de trasportar al Ovulo hacia la cavidad uterina donde va a pasar una serie de procesos para su desarrollo. Luego, después de completar la Etapa Embrionaria se crea el Feto que termina en el nacimiento del Bebé. 
            Finalmente, hablaremos del Papel de la Herencia y el Ambiente en la Formación del nuevo ser. Esto nos hace preguntarnos por qué algunas personas son tan parecidas a sus padres, por qué tienen el mismo color de ojos, de cabellos, de voz. ¿Cómo puede ocurrir esto? Todas estas preguntas han llevado a muchos hombres y mujeres a investigar todo lo referente al código molecular, el mismo que nos da las respuestas a todas estas interrogantes. Sin embargo, el ambiente también juega un papel muy importante, pues un entorno agradable, rodeado de mucho amor, cuidados, protección, hacen que el nuevo ser desarrolle un coeficiente intelectual superior al de un niño que estando en el vientre de su madre, ésta se expone al consumo de tabaco, droga, cafeína. Ahora, ¿cuáles serán los resultados de la formación de este bebé? Un coeficiente intelectual muy bajo. La autoestima estará disminuida y se verá envuelto en muchas situaciones de fracaso. Aparte de eso, tendrá problemas en las relaciones con la sociedad y preferirá estar solo y aislarse de su entorno.

CAPÍTULO I

PERSPECTIVAS QUE TIENEN UN ENFOQUE EN LA ETAPA PRENATAL Y LA CONCEPCIÓN

1.- Interpretación conceptual de la vida humana
Cuando nos referimos a la vida humana, en el Derecho y la Moral siempre hubo discusión sobre su inicio. De hecho, aquellos que argumentan desde el Derecho, siempre ha sido desde fines convencionales o políticos; mientras que, aquellos que han fundamentado sus argumentos a favor del concebido, siempre lo han hecho desde el Principio vida, como lo hace Hans Jonas, filósofo alemán, en su libro que también así tiene como título, donde postula una biología filosófica. Igualmente, cuando desde la Moral se ha dicho que la vida empieza desde el momento de la concepción, algunos han preguntado pero desde cuándo es persona. La respuesta de quienes defienden la vida del concebido ha sido la siguiente: También desde la concepción, porque el recién concebido tiene en potencia todas las cualidades y facultades que irá desarrollando en el proceso de desarrollo. Así, la existencia legal, natural y real de la persona sería desde el momento de la concepción. Y con esto tendríamos razones para estar en contra de la aprobación del Protocolo del Aborto Terapéutico, firmado por nuestro actual presidente Ollanta Humala. Además, con este protocolo se violaría la Constitución, pues ésta defiende de modo especial la vida del concebido como un ciudadano.
De este modo, el inicio de la vida humana, es un asunto que ha suscitado diversas opiniones, para establecer el momento desde cuándo se ha de proteger al concebido. El tema ha sido nada pacífico. Sin embargo, cuando Humberto Nogueira Alcalá, doctor en Derecho Constitucional, nos dice que cuando estamos ante el tema de cuándo comienza la vida humana, nos encontramos con un tema bioético. Luego, estamos frente a un sistema de valores, que defiende la vida sobre todas las cosas. No obstante, hay tres teorías que hablan del comienzo de la existencia del ser humano, las cuales postulan lo siguiente:

a)    La teoría de la concepción. Según esta teoría, la existencia del ser humano se originaría con la fertilización del óvulo por el espermatozoide, es decir, desde la fusión de los gametos masculino y femenino.

b)    La teoría de la anidación o implantación. Esta teoría, reconoce la existencia del ser humano desde que el óvulo fertilizado se fija en el útero, proceso que ocurre entre los siete y catorce días post concepción.

c)    La teoría de la implementación del sistema nervioso u organogénesis. Esta teoría, exige para reconocer un ser humano, el desarrollo rudimentario del sistema nervioso central. Para esta posición, no basta la individualidad genética. Es necesario que se presente en el feto algunas características exclusivamente humanas, las cuales comienzan a formarse desde el decimoquinto al cuadragésimo día de desarrollo embrionario.

Pero estás son sólo teorías que tienen su propia fundamentación para reconocer el inicio de la existencia de la vida humana. Con estas teorías, unos tendrán una posición argumentativa, otros otra.  Pero desde nuestro punto de vista, en contra de la teoría de implantación y de la implementación del sistema nervioso central, postulamos la teoría concepcionista como el inicio de la existencia de la vida humana. Esta tesis debería utilizarse incluso a la hora de hablar de la “Pastilla del día siguiente”. Así, la vida humana será protegida desde el primer segundo de existencia. Con estos criterios podremos entender la opción de tener hijos de los seres humanos o, en el caso de no haberlos buscado, la aceptación de éstos como un don, por quienes deben tener las razones para vivir, luchar y trabajar en este mundo, para proporcionarles lo mejor de esta vida. Además ellos jamás han pedido su existencia.

2.- De la opción por la paternidad-maternidad a la fecundación

            Respecto a la concepción del nuevo ser y su proceso de desarrollo prenatal, hay diferencias en los concebidos cuyos padres los buscaron y en quienes no. Cuando las personas quieren tener un hijo, se supone que lo hacen con la intensión de garantizarles lo mejor durante todo el proceso de desarrollo, desde el momento de la fecundación. Sin embargo, cuando el concebido es no deseado, inclusive se corre el riesgo de ser abortado, de matarlo en el vientre de su madre. Así que, según Papalia, la decisión y el momento para ser padre pueden tener amplísimas consecuencias para un niño. De este modo, se podría sacar ciertas conclusiones, cuando el concebido es planeado o accidental, o si el embarazo es deseado o no. Pero también influye la edad de los padres a la hora de concebir un hijo. Esto es lo que Urie Bronfenbrenner, en su Enfoque Ecológico, cuando habla del Microsistema, dice que, en el desarrollo del niño, en este caso de la vida del no nacido, la influencia en su desarrollo incluye el ambiente familiar inmediato, tales como el padre, la madre, los hermanos, las hermanas, abuelos y otros parientes cercanos al individuo, también personas ajenas a la familia, con las cuales el individuo crece y se forma.

            Así, el desarrollo del no nacido depende en gran medida de causas externas que a él afectan de cualquier modo. Inclusive podríamos decir, que también es influenciado por el Macrosistema, pues según éste, influyen los valores culturales y políticos de una sociedad, los modelos económicos, condiciones sociales, entre otros. Estos patrones hacen que la gente tenga sentimientos mezclados acerca de la alegría y la carga que representa la paternidad-maternidad. Incluso por estas razones, hay muchos jóvenes adultos que creen que un bebé es una carga o un intruso para sus vidas. Sin embargo, ya que la paternidad-maternidad es consecuencia casi inevitable de la relación sexual, en la actualidad, con un método confiable, la paternidad-maternidad es de más libre elección. Como consecuencia de esto, en la actualidad se ve que la mayoría de la gente tiene sus hijos alrededor de los 30 años y la mayoría de las personas encuentran en la paternidad una gran fuente de satisfacción.
            Ahora bien, si la paternidad es una fuente de satisfacción para los cónyuges, es porque en la familia, estas personas encuentran su definitiva realización. Además, el deseo de tener hijos es casi universal, independientemente de los efectos positivos o “negativos” que éstos traigan sobre el matrimonio. De este modo, los hijos son vistos como necesarios para una verdadera vida familiar y como fuente de amor y afecto para amortiguar la soledad y la falta de objetivos en la vida. No obstante, a pesar de que un hijo trae alegría a una familia, se reconoce algunas desventajas para los cónyuges, principalmente en los cambios del estilo de vida, costos financieros y problemas para el ejercicio profesional de las mujeres. Esto hace que hoy en día, muchos adultos jóvenes tengan una actitud ambivalente frente a la paternidad, pues saben que tienen una difícil decisión en sus manos. Pero esto hace también, que la paternidad sea sobrevalorada con respecto a otras opciones. Luego, si las parejas están ya preparadas para tener hijos, y quieren y pueden tenerlos, simplemente los tienen. Sucede entonces el primer paso de esta decisión, la fecundación o concepción, “el proceso por el cual el espermatozoide y el óvulo se fusionan para formar una nueva célula simple […]. La nueva célula formada por los dos gametos o células sexuales, el óvulo y el espermatozoide, se llama cigoto.

3.- De la concepción al nacimiento

Los nueve meses de gestación constituyen una etapa crucial en la vida de cada ser humano. El tipo de relación con la madre y con el exterior determinará las actitudes que nos acompañan toda la vida. La bella tarea de ser padres comienza con la concepción.

Hasta hace poco, los científicos suponían que la conciencia e inteligencia de los bebés eran muy limitadas, que los sistemas nerviosos del feto y del bebé parecían incompletos, que los sistemas neuronales no están desarrollados y que la envoltura de mielina de las células nerviosas sólo está parcialmente formada. Así, los neurólogos dedujeron que el feto no era capaz de sufrir, experimentar placer, aprender, recordar o pensar, los movimientos y expresiones del feto y del bebé eran considerados reflejos.

Pero los avances realizados a lo largo de las dos últimas décadas a través de los estudios embriológicos y fetales, utilizando la fotografía intrauterina, las imágenes ultrasónicas, el escáner con microscopio electrónico y otras tecnologías, ofrecen una nueva comprensión del mundo del ser humano aún por nacer. Asimismo, decenas de experimentos demuestran que a las pocas semanas de la concepción ya posee los sentidos del oído, el tacto y el gusto bien desarrollados; igualmente que le afectan los estímulos que llegan desde el interior del cuerpo de la madre y desde el exterior. Aún más, responde a las emociones y las expresa, es decir, el ser humano no nacido posee vida emocional y se comunica con la madre y con el mundo exterior. Luego, se forma nuestra personalidad.

4.- Un entorno acogedor

El obstetra René Van de Carr, señala que el desarrollo de las vías neuronales relacionadas con las habilidades intelectuales y motoras depende de las informaciones obtenidas a través de los sentidos. Por, tanto, los padres tienen la posibilidad de crear ya incluso durante el embarazo un entorno físico y emocional, que promueva la salud y el bienestar de sus hijos.

Sí, la calidad de la atmósfera psíquica y emocional que acoge al niño es decisiva. Además, según un estudio dirigido por la doctora Bea Bergh, el nivel de estrés de las madres durante el embarazo puede producir un impacto significativo en sus hijos:  las que sufren ansiedad prolongada entre las semanas 12 y 22 de gestación, tienen más probabilidades de tener hijos nerviosos o con déficit de atención. Sin embargo, la sociedad moderna apenas muestra preocupación por esta realidad, pues hay madres que trabajan hasta el último momento y muy pocas saben que su estado mental y anímico puede tener una influencia decisiva sobre el bienestar futuro de sus hijos.

5.- Nace la Psicología prenatal

La sociedad moderna occidental ha olvidado o se ha mantenido ajena a toda esta sabiduría, pero nace una nueva disciplina: la psicología prenatal y perinatal. Ambas están llamando la atención sobre las dimensiones emocionales y mentales del ser humano durante su propia gestación y nacimiento.

A partir de Sigmund Freud, se comenzó a tomar conciencia de que las experiencias infantiles condicionaban la personalidad adulta. Este reconocimiento implicó cambios culturales revolucionarios. Los niños adquirieron el derecho a no ser traumatizados y, en vez de integrarnos ciegamente en un orden religioso o social determinado, intentamos descubrir quiénes somos y satisfacer nuestras necesidades personales.

Ahora nos encontramos ante el reto de remontar nuestra historia vital hasta el mismo momento de la concepción. El descubrimiento del mundo interior uterino profundiza la revolución del psicoanálisis y cambia la manera en que nos vemos a nosotros mismos como individuos, así como la forma en que nos relacionamos con las personas que nos rodean. La sociedad entera está concernida sobre la consideración y el trato que recibe cada ser humano desde su concepción y el desafío es descubrir las auténticas necesidades del ser humano, desde el primer segundo de su verdadera existencia.

De alguna manera, las emociones prenatales dominan la organización social, la vida cotidiana, los deseos y las frustraciones, la política internacional, la guerra y la paz. Y cada cultura sobre la Tierra es un intento de la especie humana de recrear en el exterior el mundo uterino. Luego, el ser humano construye entornos donde le resulte posible sobrevivir.

5.1.- El origen de la creatividad: La paternidad prenatal, el programa de Morimoto

Para el ser humano, un árbol no es sólo un árbol, sino un objeto que hace las veces de placenta; es decir, de fuente de alimentación segura. El árbol se convierte en símbolo y objeto sagrado, ya que todas las culturas humanas colocan en su centro un árbol, un manantial o cualquier otra cosa que pueda remitirle simbólicamente a la placenta, El latido del corazón de la madre y los sonidos que percibe el feto se transforman en música y lenguaje, al igual que la pared del útero en la pared de la casa, o la muralla de la ciudad y la frontera internacional.

De los hallazgos de la psicología prenatal se deduce que los padres no sólo pueden influir de manera decisiva en el bienestar futuro de sus hijos, sino en el espíritu de la cultura, los valores y las relaciones sociales; y pueden hacerlo a través de los actos cotidianos.

El doctor Thomas Verny, autor de “La vida secreta del niño antes de nacer” y de “El vínculo con el niño que va a nacer”, fue el primero en hablar, ya en la década de 1970, de la “educación prenatal”, a través de la comunicación física, emocional y mental de la madre y el feto. Esta educación consistía en ejercicios y prácticas de relajación, armonización, visualización y comunicación, pensados para cada semana del embarazo.


Muchos otros investigadores continuaron los trabajos de Verny. David Chamberlain, René Van de Carr, Gabriella Ferrari o Gino Soldera, desarrollaron metodologías que incorporaban los nuevos descubrimientos científicos (Se ha ido comprobando que los sentidos del feto funcionan con mucha agudeza y desde muy pronto). Chamberlain enumera los tres aspectos esenciales de la paternidad prenatal:

Alimentar un cuerpo físico sano.- Los padres que esperan el nacimiento para cuidar la salud física de su hijo pueden llegar tarde, ya que los cimientos fisiológicos ya están construidos. Asimismo, la calidad de la alimentación de la madre o la presencia de sustancias tóxicas y contaminantes en el útero, desde medicamentos a drogas, pasando por plaguicidas y moléculas artificiales, pueden ser decisivas para la salud física y mental del niño. Una dieta nutritiva y un estilo natural de vida garantizan que el niño no se verá expuesto a agentes peligrosos. También las dietas hipocalóricas, ya sea por razones puramente estéticas o por consejo médico, son en muchos casos una amenaza para los niños.
Crear cimientos emocionales.- Una de las grandes sorpresas sobre la vida en el útero, es que el feto siente emociones y las expresa. A las diez semanas de embarazo se pueden observar gestos que revelan autocontrol, intereses y necesidades. Entre las semanas 13 y 16 es capaz de oír las voces de los padres. A las 15 semanas reacciona a la risa de la madre. La vida uterina no tiene nada que ver con la paz oceánica que los autores clásicos imaginaban. Es un mundo en comunicación intensa con la madre y el mundo exterior. El sistema emocional del niño se va organizando en función de estas experiencias tempranas. Si se siente rodeado de ira y miedo, se prepara para un mundo exterior dominado por estas emocione; en cambio, la creación de un vínculo afectivo positivo con la madre es una condición para que el hijo llegue a establecerlo con las demás personas, con la sociedad y con la naturaleza.

Establecer una conexión rica con el niño.-  Antes de nacer ya puede escuchar conversaciones, cuyo tono emocional capta y músicas que luego recuerda. Reconoce con agrado las voces de los padres y los ritmos musicales familiares, lo que le sirve para establecer los primeros vínculos emocionales con otras personas. También adquiere las bases de la lengua hablada en su idioma materno.

De igual forma, el doctor Yoshiharu Morimoto ha creado un programa de cuidado prenatal que ya ha demostrado su éxito con más 7.000 niños en Osaka (Japón). El objetivo principal es favorecer la creación de un vínculo con el feto que le conectará de una manera positiva con su familia y con el mundo exterior. Las madres que lo han realizado aseguran que los niños son independientes, seguros de sí mismos y equilibrados anímicamente.

            → Entrenamiento autógeno.- Morimoto enseña la técnica creada por Johannes Schultz. Una vez aprendida, la madre puede alcanzar un estado de relajación profunda, física y mental, muy rápidamente y siempre que lo desee. En este estado de conciencia pueden hablar con sus hijos en el útero. Luego, durante el parto pueden utilizarla para facilitar el paso por el canal vaginal.

            → Trabajo con imágenes.-   A través del juego con arena –o sandplay, terapia para acceder al inconsciente a través del modelado de figuras que se utiliza especialmente con niños, la madre crea una casa para el bebé, el ejercicio hace que la madre reviva sentimientos infantiles y provoca una empatía natural con el hijo de manera similar. Asimismo, las madres pueden modelar en papel maché la cara del hijo que esperan. En muchos casos, la máscara presenta un parecido increíble con la carita que tendrá el futuro recién nacido.

            → El juego de la patada.-  Es fascinante, sencillo y simpático. Cuando el niño da una patada espontánea, la madre palmea en el lugar donde la ha sentido, al tiempo que dice: “¡dame otra patadita, cariño!”. Es un juego que divierte al niño y le vincula a la madre y al padre, que también puede participar.

            → Charla con el niño.- Puede realizarse en cualquier momento y lugar, siempre que haya silencio y el niño dé muestras de estar despierto. Antes de comenzar a hablar, la madre tiene que relajarse y concentrarse en el amor que siente hacia su hijo. Desde esa emoción, le habla con voz alta y clara. Por otra parte, en todos los momentos del día, las madres pueden poner especial atención en las impresiones que reciben a través de sus sentidos: lo que huelen, lo que ven, lo que tocan y lo que escuchan. Su hijo disfruta de todo ello de alguna manera.

            → Escuchar música. El objetivo no debe ser sólo cultivar su inteligencia y creatividad, sino ofrecerle un mensaje de bienestar y acogimiento. Una buena idea es cantarle una canción si es posible, creada por la madre para su niño.

Más allá de todos los ejercicios que proponen los expertos, las madres tienen un instinto para dar la bienvenida al mundo a sus hijos, sólo deben dejar que salga a la luz. El resultado será generaciones de seres humanos mejor preparados para una vida plena.

CAPITULO II

EL PROCESO DE FORMACIÓN DEL NUEVO SER Y EL DESARROLLO FETAL

El comienzo de una nueva vida, según el Dr. Valdés, Armando (2010), en su libro “Embriología humana”, la formación el nuevo ser se lleva mediante etapas de desarrollo embrionario (pág. 53). Estas etapas son las siguientes:

1.- La etapa de germinal

También llamada concepción. Se produce cuando un espermatozoide consigue introducirse en un óvulo u ovocito atravesando su membrana. Los espermatozoides, atraídos por las substancias que emite el ovocito, atraviesan el cuello del útero, la cavidad uterina y se encuentran con el óvulo en una de las trompas de Falopio, cuyas vellosidades son las encargadas de transportar el óvulo hacia la cavidad uterina. La velocidad con la que el ovocito se mueve a través de la trompa es de 1,22 mm por minuto. Los espermatozoides, por su parte, se desplazan a 2-3 mm por minuto. El tiempo que tarda un espermatozoide en llegar hasta el ovocito es de unos 50 minutos.

2.- La etapa embrionaria o de implantación del cigoto

Después de que el óvulo ha sido fecundado, se transforma en una nueva célula denominada cigoto o célula huevo y comienza a descender por la trompa hacia el útero.  Un cigoto mide unos 0,15  milímetros.

En el tercer día, el cigoto comienza su división celular. Las células del cigoto se van dividiendo sucesivamente en 2, 4, 8, hasta llegar a 16. Es entonces cuando el cigoto transforma su estructura llegando al estado de mórula. Este  estado se llama así por su forma parecida a una mora. La mórula  mide unos 0,2 milímetros.

En el cuarto día,  la mórula  ha acabado su viaje a través de la trompa de Falopio y alcanza el interior del útero. Comienza una nueva transformación celular en la que las células se dividen en dos grupos. Uno de ellos comienza a formar el blasto-embrión, que es lo que será el futuro embrión. El otro grupo de células van a componer lo que se denomina trofoblasto, que es la capa que va a proteger el embrión y a su vez le va a ayudar a implantarse en el endometrio.

En el quinto día al 12, el trofoblasto segrega una serie de encimas que provocan que el endometrio sea más receptivo. El blastocito puede entonces comenzar la anidación agarrándose a las paredes del útero. El endometrio comienza a segregar la hormona llamada Gonadotropina Coriónica humana. Por efecto de esta hormona, el cuerpo lúteo no suspende la producción de progesterona. Es por eso que el ciclo menstrual se interrumpe y la matriz comienza a prepararse para el embarazo.

En el día 12 al 19, comienza la formación del saco amniótico. El embrión crece hasta alcanzar 1,5 milímetros. En estos momentos sí se hace una exploración por ecografía, se podría reconocer la existencia del embrión implantado en el endometrio.

En el día 19 al 21, el embrión adopta una forma como de suela de zapato. Es simétrico, posee vasos sanguíneos propios y comienza a formarse el corazón y crece hasta 2,5 milímetros.

En el día 21 al 23, en el embrión se ha  formado el corazón y comienza a latir. Se trata de un corazón primario el cual aún no está dividido en ventrículos.

En el día 23 al 25, el sistema central nervioso comienza a desarrollarse y el embrión mide de 3 a 4 milímetros.

En el día 25 al 27, el embrión se muestra en forma de “C”. La cabeza destaca a simple vista. Ojos y orejas comienzan a formarse. El corazón comienza a desarrollar sus válvulas y tabiques. Además empieza la formación de órganos digestivos.

3.- La etapa fetal

Esta etapa comienza desde el momento en que se ha completado la etapa embrionaria hasta que se produzca el parto. Durante la vida fetal no se forman órganos o tejidos nuevos, sino que se produce la maduración de los ya existentes.

-       Semana 9

Se forman los pezones y los folículos pilosos.
√ Los brazos crecen y se desarrollan los codos.
√ Se pueden observar los dedos del pie del bebé.
√ Todos los órganos esenciales del bebé han comenzado a crecer.

-       Semana 10

√ Los párpados del bebé están más desarrollados y comienzan a cerrarse.
√ Las orejas comienzan a tomar forma.
√ Las características faciales del bebé se vuelven más distintivas.
√ Los intestinos rotan.
√ Al final de la décima semana de embarazo, su bebé ya no es un embrión. Ahora es un feto, la etapa de desarrollo hasta el nacimiento.

-       Semanas 11-14

√ Los párpados del bebé se cierran y no volverán a abrirse hasta más o menos la semana 28.
√ La cara del bebé está bien formada.
√ Las extremidades son largas y delgadas.
√ Aparecen las uñas en los dedos de las manos y los pies.
√ Aparecen los genitales.
√ El hígado del bebé está produciendo glóbulos rojos.
√ La cabeza es muy grande, aproximadamente la mitad del tamaño del bebé.
√ Ahora su pequeño puede formar un puño.
√ Aparecen brotes dentarios para los dientes del bebé.

-       Semanas 15-18

√ En esta etapa, la piel del bebé es casi transparente.
√ Un pelo fino llamado lanugo se desarrolla en la cabeza del bebé.
√ Los huesos y el tejido muscular se siguen desarrollando y los huesos se vuelven más duros.
√ El bebé comienza a moverse y a estirarse.
√ El hígado y el páncreas producen secreciones.
√ Ahora su bebé hace movimientos de succión.

-       Semanas 19-21

√ Su bebé puede oír.
√ El bebé es más activo y continúa moviéndose y flotando.
√ La madre puede sentir una agitación en la parte inferior del abdomen. Esto se llama primeros movimientos fetales, cuando la mamá puede sentir los primeros movimientos del bebé.
√ Al final de esta etapa, el bebé puede tragar.

-       Semana 22

√ El lanugo cubre todo el cuerpo del bebé.
√ El meconio, primera deposición del bebé, se realiza en el tracto intestinal.
√ Aparecen las cejas y las pestañas.
√ El bebé es más activo con aumento del desarrollo muscular.
√ La madre puede sentir al bebé moverse.
√ El latido del corazón del bebé puede escucharse con un estetoscopio.
√ Las uñas crecen hasta el extremo de los dedos del bebé.

-       Semanas 23-25

√ La médula ósea comienza a producir glóbulos.
√ Se desarrollan de las vías respiratorias inferiores de los pulmones del bebé.
√ Su bebé empieza a almacenar grasa. 
√ La piel del feto tiene aspecto rojizo por los vasos sanguíneos y presenta  pliegues o arrugas por falta del tejido conectivo subyacente.

-       Semana 26

√ Las cejas y las pestañas están bien formadas.
√ Todas las partes de los ojos del bebé están desarrolladas.
√ Su bebé puede sobresaltarse en respuesta a los ruidos fuertes.
√ Las huellas de los pies y las huellas digitales se están formando.
√ Se forman los sacos de aire en los pulmones del bebé, pero los pulmones aún no están listos para trabajar por fuera del útero.
-       Semanas 27-30

√ El cerebro del bebé crece rápidamente.
√ El sistema nervioso se desarrolla lo suficiente para controlar algunas funciones del cuerpo.
√ Los párpados del bebé se pueden abrir y cerrar.
√ El aparato respiratorio, aunque inmaduro, produce agente tensio- activo. Esta sustancia ayuda a que los alvéolos se llenen de aire.
√ En esta semana el feto está apto para  sobrevivir.

-       Semanas 31-34

√ Su bebé crece rápidamente y acumula mucha grasa.
√ Se presenta respiración rítmica, pero los pulmones del bebé no están completamente maduros.
√ Los huesos del bebé están completamente desarrollados, pero son aún blandos.
√ El cuerpo del bebé comienza a almacenar hierro, calcio y fósforo.

-       Semanas 35-37

√ El bebé pesa unas 5.5 libras (2.5 kg).
√ Su bebé sigue aumentando de peso, pero probablemente no mucho por más tiempo.
√ La piel no está tan arrugada a medida que se forma grasa bajo la piel.
√ El bebé tiene patrones de sueño definidos.
√ El corazón y los vasos sanguíneos de su bebé están completos.
√ Los músculos y los huesos están completamente desarrollados.

-       Semana 38-40

√ El lanugo ha desaparecido excepto en los hombros y en los brazos.
√ Las uñas pueden extenderse más allá de las puntas de los dedos.
√ Se presentan pequeños brotes mamarios en ambos sexos.
√ El cabello de la cabeza ahora es grueso y más denso.

En su 40ª semana del embarazo, van 38 semanas desde la concepción y el bebé podría nacer en cualquier momento.

Cabe señalar, que  los fetos presentan diferencias entre ellos. Es decir que unos  son tranquilos, mientras que otros  se mueven y agitan con frecuencia. Y este patrón suele persistir después del nacimiento, de modo que los fetos tranquilos suelen ser bebés tranquilos, mientras que los más activos, siguen especialmente activos o nerviosos después de nacer.

Además, los fetos no solo pueden oír dentro de la matriz, sino que también son capaces de recordar y diferenciar lo que escuchan. Por ejemplo, los bebés recién nacidos suelen  preferir la voz de su madre a la de otras mujeres, o  una voz femenina a una voz masculina, lo cual  indica que pueden llegar  a recordar y preferir los sonidos que han escuchado antes de nacer.

TABLA 01
CRECIMIENTO  EN LONGITUD Y PESO DURANTE EL PERIODO FETAL
Edad (semanas)
LCR (cm)
Peso (g)
9 a 12
5 a 8
10 a 45
13 a 16
9 a 14
60 a 200
17 a 20
15 a 19
250 a 450
21 a 24
20 a 23
500 a 820
25 a 28
24 a 27
900 a 1300
29 a 32
28 a 30
1400 a 2100
33 a 36
31 a 34
2200 a 2900
37 a 38
35 a 36
3000 a 3400


CAPITULO III
EL PAPEL DE LA HERENCIA Y EL AMBIENTE EN LA FORMACIÓN Y DESARROLLO DEL NUEVO SER

Cuando hablamos de herencia inmediatamente nos ponemos a pensar por qué hay hijos que se parecen tanto a uno de sus padres, por qué tienen el mismo color de ojos, las facciones, el color de cabello, la voz. ¿Cómo puede ocurrir esto? ¿De qué manera? Todas estas interrogantes son el  esfuerzo de muchos hombres y mujeres que se dedicaron a realizar investigaciones para descifrar un asombroso código molecular que nos llevaría a las respuestas de todas estas preguntas. De este modo, según los estudios biológicos, la herencia es la dotación cromosómica de cada uno de nosotros.  Es por eso que muchos de nosotros generamos parecidos a nuestros progenitores, abuelos, bisabuelos, tíos, hermanos.

Por otro lado, el ambiente es todo lo que sucede alrededor de todos los seres humanos con dotaciones cromosómicas. Luego, la Herencia y el Ambiente están totalmente enlazados.

1.- El papel de la herencia en el desarrollo del nuevo ser

La Genética es la ciencia que estudia el mecanismo a través del cual los caracteres son heredados; sin embargo, existen diferencias externas debido a  otros factores entre los que figura el factor ambiental que de hecho da lugar a las variaciones. De hecho, un ser vivo hereda de sus progenitores ciertas características, como por ejemplo el color de la piel, el color de los ojos, la forma de expresarse y la coordinación nerviosa para comunicarse. Estas características se heredan por una sustancia responsable llamada genes, estudiada por la genética.

1.1.- La herencia dominante y la herencia recesiva

             Los genes que gobiernan expresiones diferentes de una misma característica se llaman alelos. Cada persona recibe dos alelos para una característica dada (por ejemplo, el color de ojos). Un alelo procede de la madre y otro del padre. Cuando ambos alelos son iguales la persona es homocigótica y cuando son diferentes, la persona es heterocigótica.

            Cuando la herencia recibida es heterocigótica, el rasgo que se manifiesta es el dominante. Por ejemplo, la persona tendrá los ojos marrones porque el color marrón es dominante sobre el azul, mientras que el azul es recesivo. Por tanto, para que se manifieste el azul será necesario que los dos alelos sean azules (que sean homocigóticos).
           
1.2.- El genotipo y el fenotipo

            El genotipo es la configuración genética que una persona ha heredado en su ADN. Nunca dos personas tienen el mismo genotipo, excepto los gemelos idénticos, en cambio, un fenotipo es la parte observable que se expresa el genotipo (por ejemplo, el color de ojos marrón que observamos al mirar a esa persona). Este fenotipo puede surgir de dos genotipos diferentes, es decir, de la combinación de dos alelos homocigóticos.

No obstante, hay que tener en cuenta que la herencia genética no se produce de una manera tan simple como la explicada. Para la mayoría de los rasgos, las experiencias que tiene una persona ejercen una influencia en el modo como se expresa el genotipo. Por ejemplo, una persona puede heredar una habilidad especial para la música, pero si vive en un entorno donde no se le anima ni se le motiva a practicar, ni tiene posibilidad de recibir lecciones de música ni de usar un instrumento musical, entonces no podrá expresar esta capacidad. Por tanto, a lo largo de la vida, los genes interactúan con el ambiente para influir en el desarrollo de las personas.

1.3.- Otras formas de transmisión genética

 Entre  las otras formas tenemos las siguientes:
1.3.1.- Herencia relacionada con el sexo

En este tipo de herencia, ciertos rasgos recesivos, los heredan de forma diferente los niños y las niñas. Los rasgos relacionados con el sexo se encuentran en los genes del cromosoma X. Por ejemplo, si una persona tiene problemas para distinguir el color rojo del verde, es probable que sea un hombre y haya heredado de la madre esta dificultad de la visión.

La mayoría de los genes relacionados con el sexo son recesivos, de manera que si una niña recibe de uno de sus padres un gen recesivo (por ejemplo, ceguera para los colores) en un cromosoma X, y otro gen dominante (por ejemplo, visión normal para los colores) en el otro cromosoma X del otro progenitor, se expresará el gen dominante y no tendrá problemas para percibir los colores. No obstante, sí puede transmitir el gen recesivo, de manera que es portadora de un gen de ceguera cromática que puede transmitir a sus  hijos.

Los varones, al tener un cromosoma X y otro Y. Si heredan un cromosoma X con un gen portador de ceguera cromática, expresarán siempre esta dificultad para percibir los colores.

1.3.2.- Dominio incompleto

A veces, ningún gen domina al otro, sino que se combinan las características de ambos. Esto sucede, por ejemplo, en los grupos sanguíneos. Así, si una persona hereda un alelo para el grupo A y otro para el grupo B, puede acabar expresando el grupo AB.

1.3.3.- Herencia poligénica

Este tipo de herencia sucede cuando los rasgos proceden de la interacción de varios genes. Así, el color de la piel se hereda mediante la interacción de tres o más grupos separados de genes, es decir, en tres cromosomas diferentes. Estos genes funcionan juntos para producir cientos de tonalidades diferentes. Otros rasgos físicos como la estatura y el peso, así como los rasgos del comportamiento reciben la influencia de varios genes.

1.3.4.- Transmisión multifactorial

La transmisión multifactorial hace referencia a la interacción entre la herencia y el ambiente. Así, algunas características físicas, como la estatura y el peso, y todos los rasgos psicológicos, son el resultado de la transmisión multifactorial. Por ejemplo, si un niño crece en un ambiente donde la alimentación es escasa y padece desnutrición, tendrá una estatura más baja del que estaría en condiciones más favorables.

2.- La influencia del ambiente en el desarrollo del nuevo ser

Aunque los genes tienen una influencia importante, no es menor la influencia del ambiente en el desarrollo del ser humano. De hecho, los factores ambientales parecen ser tan importantes como los genéticos. Los aspectos ambientales, también influyen y moldean la personalidad de manera decisiva. De este modo, los factores genéticos y los ambientales están entrelazados y se influyen ente sí, de una manera sumamente compleja, de modo que es difícil decir hasta qué punto un rasgo es producto de una influencia genética o ambiental.

2.1.- El ambiente prenatal

La psicóloga Muñoz  menciona que existen ciertos factores  del ambiente prenatal que pueden afectar al feto. Por este motivo, tanto la madre como el padre han de tomar ciertas medidas para garantizar que su bebé  se desarrolle en un ambiente más favorable.
2.1.1.- Nutrición de la madre
La alimentación que una mujer sigue durante el embarazo puede afectar la salud de su futuro hijo. Así, las mujeres que aumentan entre 10  y 20 kilos de peso durante el embarazo, tienen menos probabilidades de aborto o de dar a luz a bebés muertos. Asimismo, subir muy poco de peso es más peligroso que subir demasiado.
El ácido fólico que es una vitamina del grupo B es esencial para el adecuado desarrollo del sistema nervioso de los bebés. Por este motivo, a las mujeres que desean ser madres se las anima a incluir esta vitamina en su dieta antes  de quedar embarazadas y durante el embarazo.

Las madres cuya alimentación es inadecuada, tienen más probabilidades de concebir bebés que nacen  muertos o mueren al nacer o con un desarrollo cerebral anormal. De este modo, una dieta adecuada para mujeres embarazadas ha de incluir los siguientes alimentos:

·      Granos: pan, cereales, arroz y pasta.
·      Frutas y verdura, ricas en vitamina C.
·      Verduras de hoja verde.
·      Frutas y verduras, ricas en vitamina A
·      Proteínas.
·      Productos lácteos
·      Grasas y aceites.

Las mujeres embarazadas necesitan comer más de lo habitual (entre 300 y 500 calorías más por día), incluyendo proteínas extras. Asimismo, las mujeres adolescentes, enfermas, con estrés, o quienes toman la píldora hasta poco antes de quedar embarazadas necesitan más nutrientes de lo normal.

2.1.2.- El consumo de drogas  y alcohol durante el embarazo

Todo lo que ingiere la madre llega hasta el feto. Así, el consumo de drogas por parte de la madre causa serios daños, pues las drogas pueden atravesar la placenta. Del mismo modo, tomar medicamentos durante el embarazo también es peligroso, sobre todo antibióticos, cantidades excesivas de vitamina A, B6, C, D, y K; además de ciertos barbitúricos, opiáceos, varias hormonas, incluidas las píldoras anticonceptivas, andrógenos y estrógenos sintéticos. En general, no se debe prescribir ningún medicamento a una mujer embarazada, a menos que sea esencial para su salud y la del bebé.

Asimismo, el alcohol puede hacer que el niño nazca con síndrome de alcoholismo fetal, en el que se da un retraso mental antes y después de nacer, malformaciones faciales y corporales y desordenes del sistema nervioso central como perturbaciones de sueño, irritabilidad, hiperactividad, cansancio, bajo nivel de procesamiento de la información, problemas de aprendizaje y defectos motores. En otros casos, los niños pueden nacer con efectos de alcoholismo fetal, un trastorno algo menos severo, que puede incluir retraso mental, retraso en el crecimiento intrauterino y anormalidades congénitas menores. Por eso se recomienda  evitar el alcohol desde  el momento en que una mujer piensa en quedar embarazada hasta después de la lactancia.

La  nicotina también es otro riesgo para el bebé, pues debido a esta sustancia nacen con bajo peso y complicaciones que van desde el sangrado vaginal durante el embarazo hasta la muerte del recién nacido o del feto. Los niños  en edad escolar, hijos de madres que fumaron durante el embarazo pueden presentar problemas como periodos cortos de atención, hiperactividad, problemas de aprendizaje, problemas de percepción, de motricidad y lingüísticos, problemas de adaptación social y bajo coeficiente intelectual.

El consumo de bebidas que contienen cafeína, como café, té, refrescos de cola o chocolate aumenta el riesgo de aborto. Se recomienda que las mujeres embarazadas que eviten el consumo de estos alimentos. Y por último, el consumo de cocaína parece interferir con el flujo sanguíneo a través de la placenta y puede  actuar sobre el cerebro del feto hasta llegar a producir cambios en el comportamiento. El consumo de cocaína en una mujer embarazada está asociado a un mayor riesgo de aborto espontaneo, parto prematuro, bajo peso al nacer, menor circunferencia craneana y problemas  neurológicos. 

2.1.3.- Enfermedades de la madre

Algunas enfermedades contraídas durante el embarazo pueden afectar gravemente al feto. Si la madre contrae rubéola antes de la semana 11 de gestación, es casi seguro que el bebé tendrá sordera y defectos cardiacos. Sin embargo, entre las semanas 13 a 16 el riesgo es solo de 1 entre 3 y después de la semana 16 el riesgo es casi nulo. Si una mujer no sabe si está vacunada contra la rubéola puede determinarlo mediante un análisis de sangre. Si no lo está, deberá vacunarse antes de quedar embarazada.
La diabetes, la tuberculosis y la sífilis también pueden ocasionar daños al feto en desarrollo. La gonorrea y el herpes genital pueden causar problemas al bebé en el momento del parto. Los recién nacidos pueden adquirir el herpes genital simplex (VHS) de la madre o del padre, pudiendo sufrir ceguera y otros defectos o incluso morir.

La toxoplasmosis es una infección benigna que en la madre no suele causar síntomas importantes, pero en el feto puede causar daño cerebral, ceguera y hasta la muerte. Así, para evitar la infección, las mujeres embarazadas no deben consumir carnes crudas o que no estén en perfecto estado y deben evitar el contacto con las heces de los gatos o la tierra donde estos animales defecan. Las mujeres que tienen gatos, deberán hacerlos examinar para determinar presencia del parasito (toxoplasma) y no alimentarlos con carne cruda.

Las mujeres que tienen SIDA o son portadoras del virus VIH que la causa, pueden trasmitir la enfermedad al feto. Mediante una prueba es posible determinar si el recién nacido está infectado.

2.1.4.- La edad de la madre

En los últimos años, son muchas las mujeres que no tienen hijos hasta después de los 35 años o incluso después de los 40. Sobre esto, en una investigación realizada en 1990 con un grupo de 4000 mujeres embarazadas, la mayoría de raza blanca, no fumadoras, con un buen nivel de educación y que recibieron atención prenatal, se vio que las mujeres mayores de 35 años sólo presentaban un riesgo ligeramente superior que las madres más jóvenes de tener un hijo prematuro o de que naciera muerto. Sin embargo, las mujeres de mayor edad, tuvieron el doble de posibilidades de tener complicaciones en el embarazo como diabetes o hipertensión arterial. Además, con la edad, las mujeres tienen mayor posibilidad de abortos, tienen más riesgo de tener hijos con defectos y son menos fértiles.

2.1.5.- La actividad física

Las mujeres embarazadas pueden continuar practicando deportes como ciclismo, tenis, natación, correr, etc., puesto que el ejercicio moderado no pone en peligro a los fetos de las mujeres sanas. Además, el ejercicio regular evita el estreñimiento y mejora la circulación, la respiración, el tono muscular y la elasticidad de la piel, lo cual hace que el parto sea más fácil. Por tanto, se recomienda que las mujeres embarazadas practiquen un ejercicio moderado, sin aumentar su frecuencia cardiaca por encima de 150 y terminándolo poco a poco, no de manera brusca.

2.1.6.- La influencia del padre

El padre también puede contribuir en la aparición de defectos o problemas en los bebés. La exposición del padre a sustancias como la marihuana, el plomo, el alcohol, la radiación, el humo del tabaco y ciertas pesticidas, puede producir esperma anormal. Sobre esto, un estudio demostró una relación entre una dieta del padre baja en vitamina C y defectos de nacimiento o cáncer en sus hijos (Fraga, 1991). La aparición de tumores en el sistema nervioso de los niños se ha asociado con ciertas ocupaciones de sus padres, en áreas relacionadas con la electricidad, mecánica, minería, tipografía, industria aeronáutica, industria del papel (Spitz y Johnson, 1985). Asimismo, el padre fumador supone también un riesgo para su hijo, pues los hijos de padres fumadores son menos pesados al nacer y tienen el doble de posibilidades de padecer cáncer a la edad adulta. No está del todo claro si esto se debe a la influencia durante el embarazo o después del nacimiento. No obstante, tanto los padres como las madres deberían dejar de fumar definitivamente desde el momento en que deciden tener un hijo.

El consumo de cocaína en un hombre puede causar defectos de nacimiento en sus hijos, ya que esta droga ataca a los espermatozoides y durante la concepción entran al óvulo con la droga. Otras toxinas, como plomo y mercurio también pueden adherirse al esperma y entrar en el óvulo con el espermatozoide. Por otro lado, los padres mayores de 30 años tienen más probabilidades de que sus hijos tengan afecciones raras como el síndrome de Marfan (deformidades de la cabeza y extremidades), enanismo y malformación ósea.

CONCLUSIÓN

En síntesis, podemos decir que la decisión de los Padres tiene amplias consecuencias en el desarrollo y la venida de un nuevo ser. Así, influidos por el Microsistema de Urie Bronfenbrenner, afirmamos que un no nacido también recibe influencia de los padres, familiares y sociedad que lo rodea. Con todo esto, la decisión de las personas de tener hijos es una decisión trascendental, porque desde el momento que lo deciden y lo logran, sus vidas cambiarán para siempre, pues para necesitan estar psicológicamente bien preparados. Sin embargo, a pesar de todo, en los hijos, los padres encuentran la satisfacción y la realización de su vida familiar, con ellos, obtienen más razones para vivir y luchar en la vida, además de amortizar la soledad y la falta de objetivos en la vida.

Seguidamente hemos visto el proceso de formación del nuevo ser y el desarrollo fetal. Aquí hemos contemplado que el desarrollo prenatal se divide en tres etapas: germinal, embrionaria y fetal, en las mismas que el feto tiene un particular desarrollo físico y emocional, de acuerdo a cada etapa.

Finalmente, hemos visto el papel de la herencia y el ambiente, donde hemos llegado a la conclusión que ambos aspectos están ligados, ya que influyen decisivamente y afectan para bien o para mal, el desarrollo del no nacido. Así, la herencia nos hace recordar que el parecido de dos seres se debe al factor hereditario de los genes, los mismos que hacen que un ser tenga mucho parecido a sus padres, hermanos o parientes cercanos; mientras que el ambiente, por su parte, influye en el desarrollo físico y emocional del no nacido. De este modo, si se quiere que nazca un niño sano, la madre, mientras está gestando, debe abstenerse de cualquier droga o alimento que afecten al bebé. Sólo así se garantizará la vida saludable del no nacido y su óptimo desarrollo.

BIBLIOGRAFÍA

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2010    Embriología humana. La Habana: Editorial Ciencias Médicas.
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2004    Embriología médica con orientación clínica. Madrid: Editorial Médica panamericana.
            -  MASPARROTE, Serafín
1998    Biología. Noveno grado de educación básica. Caracas: Editorial Biósfera.
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1984    Aspectos Esenciales del Desarrollo de la Personalidad en el Niño. México: Editorial Trillas.
            -  DIAZ CARDONALL, R.

                        2010    Un futuro sin barreras. Cuba: Edición Pueblo y Educación.

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